Introduccion

Cuando se es niño y se juega a ser maestro sueles dedicarte a sentar a los demás niños frente a ti y a regañarlos si no hacen lo que tú quieres, pero cuando deja de ser un juego y sin darte cuenta estas a punto de terminar la licenciatura de inclusión educativa y estas a nada de cumplir ese sueño, tu perspectiva cambia sobre que es realmente ser Maestra.

Actualmente al parecer cada persona tiene su propia descripción, para los niños, un ejemplo a seguir; para los adolescentes, otra persona a quien poner a prueba su autoridad; para los padres de familia, un dolor de cabeza; personas en general, los que se dedican a jugar con niños y les pagan; pero la realidad es otra.

Ser docente es descubrir el brillo de cada uno de nuestros alumnos y pulirlos hasta que estos se conviertan en un diamante, tal vez suene muy romántico, pero al menos es mi perspectiva. Ahora a esto súmale ser docente en inclusión educativa, te da como resultado el trabajo más bonito.

Inclusión educativa es saber trabajar con todos los niños, desde prescolar hasta secundaria, trabajando con cualquier discapacidad o neurodivergencia y sin llegar a excluir a nadie. Talvez, nuevamente suene muy lindo, pero la realidad es otra, cuando te encuentras en un multigrado con multidiscapacidades te das cuenta que no era tan fácil como te lo contaron en la normal.

No es fácil, tampoco es dedicarse solamente a jugar, es encontrar los aspectos en los cuales los alumnos todavía no dominan y ayudarlos a lograrlo, así como también enseñar contenidos que lo ayudaran en un futuro. ser docente es darles las herramientas a nuestros alumnos para que, en un futuro, puedan lograr todo lo que ellos sueñan.