mis aprendizajes en el primer mes de mi servicio de práctica profesional

yo estoy practicando en el CAM de Tequisquiapan "Nemiliztli" en el salón de secundaria multigrado audición, donde tengo a 8 alumnos sordos y 2 hipoacúsicos. de los cuales el 90 porciento habla la lengua de señas al 100 menos uno que no tiene ningún conocimiento de lengua de señas.

Estas semanas que he tenido la oportunidad de trabajar eh aprendido diferentes cosas desde un mejor manejo de la gramática en LSM, así como más vocabulario, también su manera de trabajo como sus estilos de aprendizaje.

Pero lo más destacable es que he ido aprendiendo de la personalidad de cada uno de mis alumnos, desde Asunción que tiene la paciencia de enseñarme y explicarme como se hacen correctamente las señas, hasta Felipe y mariano que se sienten de cierta manera tímidos conmigo, hasta el que tiene cierto rechazo hacia mi persona por no tener un buen manejo de la LSM y me ignora o el que no acepta que es sordo y me dice que mejor le hable porque no me entiende si uso la lengua de señas. 

Cuando se nos habla en primer semestre sobre los alumnos sordos, uno tiene cierta imagen de ellos, como que serán todos de la misma manera y ahora que de verdad he tenido la oportunidad de conocer más de cerca a estos chicos he comprendido que cada uno tiene su propia personalidad y el hecho de ser sordos no los hace distintos a cualquier adolescente.

Si recién entras a un grupo de sordos y no manejas su lengua a la perfección, es muy probable que obtengas cierto rechazo y es normal, es muy fácil frustrarse o sentirse triste por no saber lo suficiente de su lengua y tener miedo a equivocarte, pero hablando desde mi experiencia, puedo asegurar que es cuestión de practica y de dedicarle tiempo para aprender a tener una adecuada comunicación.

Yo me sentí insegura los primeros días y con mucho miedo, pero esos sentimientos han ido disminuyendo entre más conozco a mis alumnos porque tienen esa magia de hacerte reír con sus ocurrencias y de divertirte en las clases, claro que no todo es de color rosa porque, aunque sean sordos siguen siendo adolescentes y tendrán sus episodios de rebeldía.